Boston, MA. 17 Nov. (Rhode Informa) Anoche, los Boston Celtics se enfrentaron a los Philadelphia 76ers en un emocionante partido que dejó a los fanáticos al borde de sus asientos. A pesar de las bajas notables de Jaylen Brown y Kristaps Porzingis, los Celtics demostraron su valía con una actuación estelar.
En el primer cuarto, con jugadores como Al Horford y Sam Hauser asumiendo roles destacados, los Celtics sorprendieron a todos al liderar 37-22. Dalano Banton se destacó con jugadas impactantes, incluido un robo a Joel Embiid que llevó a una canasta fácil para Jrue Holiday.
El segundo cuarto vio a los 76ers intentar cambiar el rumbo con una presión a toda cancha. Aprovecharon la ausencia de Porzingis, explorando ángulos de tiro desde todas las direcciones. La ventaja de los Celtics se desvaneció, y al medio tiempo, estaban detrás 58-57.
En la segunda mitad, Derrick White emergió como el líder, orquestando jugadas efectivas con Luke Kornet. A pesar de los esfuerzos de los 76ers, White tomó el control, ripostando a Embiid y anotando un crucial triple que devolvió a los Celtics una ventaja de siete puntos.
Con Holiday, Horford y Tatum desempeñando roles fundamentales en los momentos finales, los Celtics sellaron la victoria 105-100. Aunque los 76ers amenazaron, una desafiante defensa y decisiones acertadas aseguraron el triunfo para Boston.
Este emocionante encuentro demuestra la resiliencia de los Celtics y establece el tono para una temporada llena de emociones y promesas.