Miami, 28 mar (EFE).- Manuel Carrasco, Aitana, Omar Montes, Bad Gyal, Lola Índigo y Héctor Pérez son algunos de los artistas españoles que tiene claro su objetivo de conquistar EE.UU., como hace 45 años lo hizo Julio Iglesias, aunque esta vez lo hacen con mucha más variedad de géneros.
Con un camino ampliado por estrellas de la talla de Alejandro Sanz y David Bisbal, esta nueva generación de cantautores españoles ha llegado pisando fuerte con estrategias de marketing de guerrillas y una mezcla géneros a diferencia de sus antecesores.
“La música siempre ha sido un puente. Esa sigue siendo la misma herramienta de comunicación y de conexión de los artistas de antes y ahora”, afirmó a EFE Héctor Pérez, quien pasó varias semanas en Miami, presentando su música.
“La diferencia es que ahora contamos con las plataformas (de streaming) y las redes para compartir nuestras canciones. Ahí no hay fronteras”, agregó el artista quien entró al mercado estadounidense con “Dame una semana”, una canción con arreglos modernos que evoca el rock en español de los años 60.
PLURALIDAD DE GÉNERO
Sin dejar de coquetear con elementos urbanos, Pérez se ha anclado en la música melódica con fuerte influencia pop. Por su parte Carrasco se ha concentrado en el pop suave.
En contraste, el trap es parte de la columna vertebral de Montes, Lola Índigo y Bad Gyal, pero cada uno ha incorporado mezclas dinámicas con diferentes sonidos urbanos globales y raíces locales.
Montes es el más cercano a los sonidos que han logrado popularizar Rosalía y C. Tangana, con fuerte presencia del flamenco, aunque en su caso, hay un poderoso ingrediente de crudeza urbana, que ha llamado la atención de publicaciones en inglés como la revista Rolling Stone.
La conquista de América fue parte de las metas que Montes se propuso cuando comenzó la creación de “Quejíos de un maleante”, su más reciente disco para el que contó con productores estadounidenses.
Por ejemplo, “en algunas de las canciones del disco con más flamenco, el bajo es un 808 de trap que tenían algunos de los productores con los que trabajé en Atlanta (EE.UU.)”, explicó Montes a EFE.
ESTRATEGIAS PODEROSAS
Montes no fue el único que abandonó sus fronteras para hacer su música, como antes lo hizo Rosalía. Pérez hizo su “Dame una semana” y otros temas de su próximo disco en México.
“No fue fácil pues yo siempre he hecho mis propias canciones, pero me pareció importante experimentar cosas nuevas en esta nueva etapa”, dijo Pérez.
Manuel Carrasco escogió teatros en Miami y en Nueva York para debutar ante el público estadounidense este marzo. Fue algo que hizo en varias oportunidades Melendi, y que le redituó en dos llenos en el Miami-Dade Arena, el recinto más grande de la ciudad, días antes, sin que ninguna de sus canciones llegara a arrasar en las listas de popularidad.
Bad Gyal tiene una colaboración en el exitoso álbum de Karol G, “Mañana Será Bonito”, el primero en español de una artista femenina en debutar en el primer lugar mundial de popularidad. Se trata de “Kármika”, en la que también participa el jamaiquino Sean Paul.
“El que Karol me haya invitado a cantar con ella en su disco es increíble, pero más el apoyo que he recibido de ella”, dijo la artista a EFE.
Bad Gyal también interpretó el tema en vivo durante uno de los conciertos que la colombiana dio en Puerto Rico hace unas semanas.
Lola Índigo también sonó en Estados Unidos gracias a “Niña de escuela”, su colaboración con la argentina TINI y la mexicana Belinda, pero para ella fue solo el inicio de su “sueño americano”.
“Como todo el mundo, venimos a cumplir nuestros sueños y a conectarnos con cada vez más gente. Estar en Miami en una alfombra, en escenarios, es un paso gigante”, indicó a EFE.
