Washington, 7 jul (EFE).- La creación de empleo en Estados Unidos se ralentizó considerablemente en junio, aunque la tasa bajó una décima hasta el 3,6 %, según datos publicados este viernes por la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS, en inglés).
Así, en el sexto mes del año se crearon 209.000 empleos netos, 130.000 menos que en mayo, en un momento en el que se analizan de cerca los efectos que están teniendo en el mercado laboral las subidas de tipos de interés que ha llevado a cabo la Reserva Federal (Fed) para frenar la inflación.
La cifra neta de creación de empleo está por debajo de la media de los últimos seis meses, que es de 278.000 puestos creados.
En 2022 el promedio fue de 399.000 empleos creados por mes por lo que los efectos de las subidas de tipos estarían afectando ya a la creación de empleo, aunque la tasa de desempleo siga siendo baja.
En junio, el desempleo cayó una décima después de que en mayo subiera tres. La BLS recordó que, desde mayo de 2022, este indicador ha oscilado siempre entre el 3,4 % y el 3,7 %.
En total, 6 millones de estadounidenses se encontraban sin empleo a finales de junio, un mes en el que el empleo siguió mostrando una tendencia alcista en el Gobierno, la atención médica, la asistencia social y la construcción.
En junio, las ganancias promedio por hora de todos los empleados en las nóminas privadas no agrícolas aumentaron 12 centavos, o un 0,4 %, hasta los 33,58 dólares.
Durante los últimos 12 meses, las ganancias promedio por hora han aumentado un 4,4 %, en un momento en el que la inflación se sitúa en el 4 %, según los últimos datos de mayo.
Desde que alcanzara un pico del 9,1 % en junio de 2022, la inflación ha ido bajando, como consecuencia de la serie de subidas de los tipos de interés llevadas a cabo por la Fed para bajar los precios.
En su última reunión, a mediados de junio, la Fed decidió pausar temporalmente las subidas aunque advirtió que probablemente sean necesarios nuevos incrementos. Los tipos están en una horquilla de entre el 5 % y el 5,25 %, la cifra más alta desde mediados de 2006.
Estas probables nuevas subidas dependerán de cifras macroeconómicas como el desempleo o la inflación. La Fed mantendrá su próxima reunión los días 25 y 26 de julio.