Washington, 7 oct (EFE).- El Senado de Estados Unidos aprobó este jueves suspender el techo de endeudamiento hasta diciembre para evitar así que el país incurra en una suspensión de pagos de su deuda nacional a partir del 18 de octubre.
Los demócratas aprobaron únicamente con sus votos -50 a 48- la suspensión del techo de endeudamiento después de que la oposición republicana se negase a colaborar con el Ejecutivo de Joe Biden, poniendo así en riesgo la solvencia de EE.UU. y la estabilidad de los mercados financieros.
El proyecto pasa ahora a la Cámara Baja, cuya mayoría demócrata deberá aprobar antes de que finalice la próxima semana.
El voto de este jueves en el Senado se produjo después de que el líder republicano en el Senado, Mitch McConnell, accediese horas antes a renunciar al mecanismo parlamentario que requiere una supermayoría, permitiendo así que los demócratas aprobasen solos la medida.
La decisión de McConnell enfureció a una gran parte de los republicanos, que llevaban semanas tensando la cuerda con la economía estadounidense al borde del precipicio.
El pacto al que McConnell accedió tan solo permite suspender el techo de deuda hasta el 3 de diciembre, por lo que Estados Unidos puede encontrarse en la misma situación de aquí dos meses.
El acuerdo despertó una respuesta tibia en la Casa Blanca, que llevaba días insistiendo en que se necesitaba suspender el techo de deuda más a largo plazo y tendrá que conformarse ahora con una solución temporal.
La secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, había alertado en varias ocasiones que la fecha del 18 de octubre podía ser la que Estados Unidos incurriese en una suspensión de pagos de la deuda nacional por primera vez en su historia.
Esa temida suspensión de pagos podría haber desatado el caos en los mercados financieros y haber rebajado la nota de solvencia de Estados Unidos.
Esta situación sobre el techo de deuda se produce porque, a diferencia de otros países, en Estados Unidos el Gobierno solo puede emitir deuda hasta el límite establecido por el Congreso, que tiene el poder de elevar ese techo según crea conveniente.