Washington, 2 may (EFE).- El exagente Edsaúl Mendoza de la Policía de Filadelfia (Pensilvania) fue acusado de homicidio en primer grado por la muerte del adolescente Thomas Siderio, informó hoy lunes el fiscal de distrito Larry Krasner.
Según la Fiscalía, Mendoza, de 26 años de edad, era uno de cuatro policías vestidos de civil que se hallaban en un automóvil sin insignias policiales cuando el 1 de marzo interceptaron a Siderio, de 12 años de edad, y a otro joven, de 17 años, identificado en los documentos policiales como “NK”.
La versión de la Policía indica que Siderio al parecer disparó un arma de fuego hacia el automóvil y luego escapó corriendo, seguido por los agentes.
Después que la Policía hizo varios disparos, uno de los cuales alcanzó a Siderio en la espalda, aunque el fiscal dijo que los vídeos del incidente muestran que el menor posiblemente se hallaba ya tendido en el suelo.
Para el momento de los últimos dos disparos Siderio estaba desarmado ya que se había deshecho de su pistola a unos 13 metros del sitio donde fue baleado, según el fiscal.
“En esa distancia había varios vehículos estacionados y algunos espacios de estacionamiento vacíos”, afirmó Krasner. “Thomas Siderio había dejado de correr y posiblemente se había rendido cuando le dispararon”.
“Así es que cuando el agente Mendoza hizo el tercer disparo, que fue fatal, él sabía que Siderio, de 12 años, 1,52 metros de estatura y 50 kilogramos de peso, ya no tenía un arma ni la capacidad de herirlo”, dijo Krasner.
Mendoza fue detenido este lunes en la mañana y permanece detenido sin fianza. Habrá una audiencia preliminar sobre el caso el 16 de mayo.
Los cargos se formularon dos meses después de que la jefa de Policía de Filadelfia, Danielle Outlaw, ordenó el despido de Mendoza por violación de las instrucciones del Departamento de Policía sobre el uso de la fuerza.