Los Ángeles, 29 nov (EFE).- La división de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) reportó este lunes los primeros resultados de un nuevo programa que persigue la explotación laboral de extranjeros, con el que se logró el arresto y acusación de 24 personas por supuestamente someter a trabajadores mexicanos y centroamericanos a condiciones “brutales”.
El operativo “Blooming Onion” permitió el arresto y la formulación de 54 cargos contra 24 personas que trajeron a Estados Unidos “docenas de víctimas de esclavitud moderna” para ser explotadas en condiciones inhumanas en los campos de Georgia, Florida y Texas, dijo en un comunicado el ICE.
Los acusados supuestamente usaron de forma fraudulenta el programa H2A para trabajadores agrícolas temporales al traer a personas de México, Honduras y Guatemala, a las que exigieron pagar tarifas ilegales por transporte, alimentación y vivienda mientras les retenían ilegalmente sus documentos de viaje e identificación.
Además, obligaron a los trabajadores a “realizar trabajos físicamente exigentes por poco o ningún salario, alojándolos en condiciones de hacinamiento, insalubres y degradantes, amenazándolos con la deportación y el uso de violencia”, detalla la acusación.
La explotación de los trabajadores incluía que estos tuvieran que extraer cebollas con sus manos sin ninguna protección. También fueron retenidos en habitaciones atestadas y campos de trabajo cercados con poca o ninguna comida, instalaciones de cañería limitadas y sin agua segura para beber.
Los acusados también amenazaron presuntamente con matar a algunos de los trabajadores o sus familias, y en muchos casos vendieron o intercambiaron a los trabajadores a otros acusados, asegura el comunicado. Los acusados supuestamente utilizaban armas para amenazar a los trabajadores.
Al menos dos de los extranjeros murieron como resultado de las condiciones de trabajo.
La lista de cargos incluye fraude postal, tráfico internacional de trabajadores forzados y lavado de dinero, entre otros.
Los acusados obtuvieron más de 200 millones de dólares con este esquema, lavando los fondos a través de compras en efectivo de terrenos, casas, vehículos y negocios, asegura la acusación.
El ICE recalcó que las nuevas prioridades sobre arresto y deportación implementadas desde hoy por la dependencia ayudarán a perseguir esta clase de crímenes.
Entre las nuevas medidas, los agentes del ICE no deberán arrestar y deportar a trabajadores agrícolas e individuos de otras comunidades vulnerables.
“Los trabajadores no autorizados nunca deben tener miedo de denunciar prácticas laborales ilegales como salarios deficientes, condiciones laborales inseguras y otras formas de explotación laboral”, advirtió el director ejecutivo adjunto de HSI, Steve Francis.
Añadió que HSI ha cambiado su postura hacia un nuevo modelo centrado en investigar a empleadores sin escrúpulos que explotan a los no ciudadanos basándose en su falta de estatus migratorio legal, a través de condiciones de trabajo peligrosas, pago insuficiente y uso de los extranjeros como un “modelo de negocio” para maximizar las ganancias.
La lista de acusados es encabezada por María Leticia Patricio, de 70 años, la persona de mayor edad entre los detenidos.
Los inmigrantes indocumentados Antonio Chávez Ramos, Victoria Chávez Hernández, Juan Francisco Álvarez Campos, Rodolfo Martínez Maciel y Daniel Merari Canela Díaz, todos oriundos de México, también fueron acusados.