Washington, 4 jul (EFE).- El principal sospechoso de matar a seis personas y herir a otras 25 en un tiroteo masivo este lunes en la localidad de Highland Park (Illinois) durante un desfile del 4 de julio fue detenido por las autoridades, dijo el jefe de Policía de la localidad, Lou Jogmen.
“Vamos a tener que conectar (al detenido) con la escena del crimen, queremos seguir el proceso adecuado”, dijo Jogmen al explicar que el arrestado es Robert Crimo, de 22 años, cuyo nombre e imagen revelaron las autoridades como “persona de interés” en el crimen pero que no está oficialmente considerado como sospechoso todavía.
Jogmen explicó a los periodistas que ahora la policía deberá interrogar a Crimo para determinar su conexión con el tiroteo y que, si todo sigue su curso sin incidentes, no habrá más actualizaciones a la prensa hasta mañana.
“A no ser que ocurra algo significativo esta noche, vamos a dejar que continúe el proceso”, dijo el policía.
Aun así, Jogmen quiso dejar muy claro que esto no significa que la investigación haya finalizado, ya que todavía están recabando información sobre el suceso, y pidió a cualquier individuo con vídeos o datos de interés que se ponga en contacto con las autoridades.
“Nos sentimos alentados por tener a una persona de interés bajo custodia, pero de nuevo, vamos a seguir atendiendo a todo lo que nos llegue”, remarcó el jefe de la policía local.
Jogmen explicó que el sospechoso fue detenido “sin incidentes” tras una breve persecución, en la que participaron agentes locales, estatales y federales.
Todavía no se conoce el motivo del suceso.
Esta mañana, un hombre identificado por las autoridades como un joven de entre 18 y 20 años abrió fuego desde una azotea usando un “fusil de alto calibre” sobre la multitud reunida para disfrutar de un desfile por el Día de la Independencia estadounidense, en la localidad de Highland Park, cercana a Chicago (Illinois).
Los disparos dejaron al menos 6 personas muertas y 25 heridas, según detallaron los responsables sanitarios locales en rueda de presa.
En lo que va de año ha habido 310 tiroteos masivos -aquellos en los que se ven afectadas cuatro o más personas, además del tirador- en Estados Unidos.