Washington/Moscú, 7 dic (EFE).- Estados Unidos advirtió este martes a Rusia de que responderá a un posible ataque a Ucrania con fuertes medidas económicas que podrían incluir la “suspensión” de un gasoducto ruso, además de reforzar la defensa en el flanco este de la OTAN.
Ese fue el mensaje del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en una cumbre virtual de dos horas con su homólogo ruso, Vladímir Putin, centrada en los temores de Occidente de que los movimientos de tropas rusas en la frontera con Ucrania sean el preludio de una invasión de ese país.
“El presidente Biden miró a los ojos hoy al presidente Putin y le dijo que hay cosas que no hicimos en 2014, y que estamos preparados para hacer ahora”, aseguró el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, en una rueda de prensa después de la cumbre.
El asesor de Biden se refería a la respuesta de Estados Unidos y sus aliados europeos a la invasión rusa de la península de Crimea en 2014, que consistió sobre todo en golpear a Moscú con sanciones económicas, pero no llegó al punto de proporcionar ayuda letal a Kiev.
UNA AMENAZA MAYOR QUE EN 2014
Estados Unidos y Ucrania creen que Rusia prepara una incursión en territorio ucraniano que podría producirse a principios de 2022, y que por eso ha desplegado entre 70.000 y 94.000 soldados rusos en su frontera con el país vecino, según estimaciones de la inteligencia estadounidense citadas por medios locales.
Esa capacidad militar rusa posicionada en la frontera con Ucrania es “mucho mayor y a una escala mucho más letal” que la que precedió en 2014 a la invasión de Crimea, aseguró este martes la subsecretaria de Estado para Asuntos Políticos de EE.UU., Victoria Nuland, en una audiencia ante el Senado.
En la cumbre virtual, Biden fue “directo y franco” sobre las medidas que tomará Estados Unidos si Putin lleva a cabo una incursión militar en Ucrania, y dejó claro que no dudará en “proporcionar más materiales defensivos a los ucranianos”, explicó Sullivan.
Además, Washington “respondería de forma positiva” a una posible petición de sus aliados de la OTAN en el flanco este, como Rumanía o Polonia, de reforzar su defensa en caso de que Rusia invada Ucrania, apuntó Sullivan.
Eso incluiría posibles “despliegues adicionales” de tropas estadounidenses en la zona, que Sullivan pidió interpretar en el contexto de la “presencia rotatoria” que Estados Unidos mantiene en el territorio de sus aliados de la OTAN, y no como el inicio de una nueva operación militar.
POSIBLE “SUPENSIÓN” DEL GASODUCTO RUSO
En el plano económico, Biden amenazó a Putin con “fuertes medidas” que Estados Unidos tomaría en consonancia con sus aliados europeos, y la Casa Blanca precisó que está en juego el futuro del gasoducto ruso Nord Stream 2, que aún no ha comenzado a operar y que tiene como objetivo transportar gas de Rusia a Alemania.
“Si Vladímir Putin quiere ver gas fluyendo a través de ese gasoducto, puede que no quiera asumir el riesgo de invadir Ucrania”, dijo Sullivan.
Poco después, la diplomática estadounidense Nuland fue más clara ante el Senado, al afirmar que si Rusia toma medidas en Ucrania, su expectativa es “que el gasoducto Nordstream 2 sea suspendido”.
Estados Unidos ha hablado sobre esa posibilidad con los Gobiernos entrante y saliente de Alemania, según Sullivan, en una muestra del interés de Biden por coordinar lo más estrechamente posible su respuesta con la de sus aliados europeos.
Después de hablar con Putin, Biden llamó casi inmediatamente al presidente francés, Emmanuel Macron, la canciller alemana, Angela Merkel; y los primeros ministros de Italia, Mario Draghi, y del Reino Unido, Boris Johnson.
Todos ellos acordaron mantener un “enfoque coordinado y exhaustivo” en su respuesta a los movimientos de tropas de Rusia, y confiaron en que Moscú acabe por “reducir las tensiones e implicarse en una vía diplomática” con Kiev y sus aliados europeos, indicó la Casa Blanca en un comunicado.
LA RESPUESTA DE PUTIN
Biden telefoneará además este jueves al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, para coordinar posturas tras la llamada con Putin, según el Gobierno estadounidense.
La respuesta de Putin a las advertencias de Biden consistió, según el Kremlin, en minimizar la gravedad de los actos de Rusia e insistir en que considera una línea roja el posible ingreso de Ucrania en la OTAN, y quiere conseguir “garantías plasmadas jurídicamente” de que eso no ocurrirá.
“No hay que poner toda la responsabilidad en los hombros de Rusia, ya que es precisamente la OTAN quien efectúa peligrosos intentos de colonizar territorio ucraniano e incrementa su potencial militar en nuestras fronteras”, indicó el Kremlin en un comunicado.
Biden ya ha dado señales de que no está por la labor de responder a esa petición de Rusia, y este martes se limitó a indicar que analizará esa solicitud “con sus aliados” europeos, afirmó tras la cumbre un asesor de Putin, Yuri Ushakov.